Manuel Alonso

Por: Almudena Ortuño

Aquellos que han heredado un restaurante familiar se enfrentan al desafío de convertirlo en un barco propio. El confinamiento fue un tiempo de meditación para Manuel Alonso. Junto a su padre, decidió que el restaurante de toda la vida, Casa Manolo, siguiera su propio rumbo y reivindicara los platos clásicos, como el rape envuelto en patatas fritas o el popular arroz con bogavante. Sin embargo, el restaurante gastronómico, premiado con una estrella Michelin, se desmarca de esta estela y navega hacia las elaboraciones más técnicas. Sin renunciar a la cuchara ni a la tradición, pero prestando atención al entorno y al horizonte, que siempre será marinero. Estamos en la orilla de Daimús, eso no cambiará.