Taberna de Lillas Pastia

Por: Juan Barbacil

Sigue siendo una de las apuestas más certeras de la cocina aragonesa. Su ‘casa de la trufa’ es un proyecto gastronómico asentado bajo la dirección de Carmelo Bosque, su cocinero y propietario, que se encuentra en la planta baja del edificio más significativo del modernismo de Huesca, el Casino, que le confiere un ambiente singular y acogedor que no pasa desapercibido al visitante. El estrellado chef pidió prestado a Bizet el nombre de la ópera Carmen para llamar así a su taberna, donde se elabora una excelente cocina. Una de las propuestas más seguras de Aragón y un cocinero de referencia. Tiene un sol en la Guía Repsol.