Bodega Cigaleña
Por: Javier Hernández de Sande
El interior de este restaurante es un auténtico museo del vino desde 1949, con paredes llenas de botellas que exhiben colecciones extranjeras y españolas de grandes caldos. Su cocina se basa en productos tradicionales, destacando los magníficos embutidos, las verduras de temporada salteadas o las mollejas de lechazo encebolladas; así como los pescados del Cantábrico y las carnes de primera. Para los amantes del queso, regálense la tabla de quesos internacionales, es una pasada. De su bodega hay que destacar, sin ninguna duda, la magnífica carta de vinos diseñada por su sumiller y propietario, Andrés Conde, que sorprenderá con los maridajes más atrevidos.
Carta: 35-40 €.